SIN ESCRIBIR EN EL BLOG
Llevo casi cuatro meses sin escribir en
este blog “La Roda, mi patria chica”
y no es por pereza ni por pasividad, puesto que no he dejado de hacerlo, aunque
no aquí. Pero no siempre puedes escribir inmediatamente donde quisieras con los
nuevos datos y cuestiones que has encontrado, sobre todo si los reservas para
otros momentos programados desde hace años.
Anteriormente a este blog, pude publicar
algunas obras en narrativa histórica, contando cronológica, fidedignamente y lo
mejor que pude, aquello que sucedió e investigué de nuestra querida tierra en algunos temas que
me interesaban o me encargaron, y ahora estoy intentando escribir sobre mas
temas de nuestra villa que no están investigados; pero deseo transmitírselos de otra forma. Es
decir, sin desvirtuar los hechos, las
circunstancias y los personajes reales de nuestro pasado, pero reflejando posibles diálogos y enredos,
etc. que hagan su lectura más amena.
Por ello, trabajo en nuevos proyectos; creando una obra literaria en prosa,
basándome en hechos que ocurrieron en épocas pasadas y en la que intervienen personajes
reales y algún ficticio. Y me refiero a la novela histórica.
Me hace
ilusión pensar que puedo transportarme al pasado de una forma más cautivadora y
encadenada, llevando de la mano a los lectores que quieran seguirme. Estoy
corrigiendo y repasando una novela primera, ya terminada. Y al tiempo sigo
escribiendo una segunda que llevo bastante adelantada. Posteriormente las
intentaré publicar.
Y para
qué les voy a contar algo de otras actividades creativas que me apasionan y
tengo muy abandonadas por seguir escribiendo, si cada uno se complica la vida a
su gusto. ¿Para qué voy a mencionar mi
ansiedad por no reiniciar la escultura, la pintura, la guitarra…?
Estas líneas deseo que me sirvan de
justificación ante algunas personas que miran de vez en cuando este blog y no encuentran un nuevo artículo desde hace
varios meses. Y les pido disculpas.
Me gustaría escribir “más a menudo” para
mantener vivo y activo este humilde rincón de investigación.
ADOLFO MARTÍNEZ GARCÍA